Mario Draghi presentó la semana pasada su informe sobre la competitividad de Europa, y las conclusiones son desoladoras. A continuación, vamos a destacar los mensajes más relevantes.
El crecimiento en Europa ha estado bajando durante décadas. La brecha de PIB entre la Unión Europea y Estados Unidos se ha ampliado mucho. Esto ha tenido un costo directo para los hogares europeos. Sus ingresos disponibles han crecido a casi la mitad del ritmo de los estadounidenses desde el año 2000.
Aunque esta desaceleración fue, durante mucho tiempo, más un inconveniente que una crisis, hoy el panorama ha cambiado drásticamente. Con una población en declive, la UE depende cada vez más de la productividad para impulsar su crecimiento. Si la productividad europea sigue creciendo al ritmo actual, solo será suficiente para mantener el PIB constante hasta 2050.
A medida que la necesidad de crecimiento aumenta, la UE se enfrenta a desafíos monumentales: digitalizar, descarbonizar la economía, mejorar su capacidad de defensa y mantener su modelo social en una sociedad envejecida.
Las inversiones necesarias son colosales; se estima que será necesario incrementar la inversión en cinco puntos porcentuales del PIB, un nivel no visto desde los años 60 y 70. Esto es mucho mayor que los aportes del Plan Marshall, que representaron entre el 1-2% del PIB anual entre 1948 y 1951.Destacan tres áreas clave donde se deben centrar los esfuerzos para revitalizar la competitividad:
- La primera es cerrar la brecha de innovación con Estados Unidos. Europa ha quedado rezagada en la revolución digital y su debilidad en tecnologías emergentes es preocupante. Aunque Europa tiene ideas innovadoras, estas no se traducen en productos comerciales.
- Las empresas en Europa tienen regulaciones estrictas y poco financiamiento. Esto hace que muchos emprendedores busquen capital en Estados Unidos.
- La segunda área de enfoque es combinar la descarbonización con la competitividad. Europa es líder en innovación en tecnologías limpias. Sin embargo, enfrenta altos costos de energía en comparación con EE.UU. Esto puede frenar el crecimiento si no se manejan bien los beneficios de las energías renovables.
- Por último, el informe subraya la necesidad de mejorar la seguridad y reducir las dependencias. Europa es vulnerable debido a su dependencia de unos pocos proveedores de materias primas críticas y tecnología digital. Para enfrentar este desafío, el informe pide a la UE que desarrolle una política económica exterior fuerte. También sugiere fomentar asociaciones industriales y mejorar su capacidad de defensa.
El financiamiento de estas inversiones es muy importante. Aunque Europa tiene un alto nivel de ahorro privado, se necesita más intervención pública. Draghi subraya que, sin reformas estructurales, la UE enfrentará compromisos difíciles entre bienestar, medio ambiente y libertad.
Nota: Este contenido forma parte del resumen semanal gratuito que podrás encontrar en LWS Financial Research: https://lwsfinancialresearch.substack.com/p/resumen-semanal-2109
