¿Cómo se paga la deuda Pública?
En el debate económico, muchos economistas defienden que nadie tiene que pagar por el endeudamiento público. Porque se refinancia constantemente.
Esta teoría ha cobrado fuerza entre ciertos círculos financieros y académicos. Nosotros argumentamos que es una falacia, pues la deuda pública siempre se paga. De una forma u otra, salvo, lógicamente que incurramos en una suspensión de pagos. Con sus terribles consecuencias para el país.
¿Refinanciar es lo mismo que pagar?
Los primeros piensan que la deuda pública nunca se paga porque se refinancia. Pero esta práctica simplemente alarga la cadena de obligaciones sin eliminarla. Técnicamente no se realiza un pago directo, pero la realidad es que la deuda se cubre contratando más deuda pública para amortizar la existente.
La consecuencia directa de este proceso es que la deuda se paga con más deuda. Lo que entraña un ciclo sin fin con consecuencias financieras muy graves. Resumiendo:
- En primer lugar- Aclaremos la diferencia entre refinanciar y pagar la deuda pública.
- La refinanciación prolonga las obligaciones sin eliminarlas. Dando lugar a un ciclo de endeudamiento continuo.
- Aunque no se realice un pago directo, la deuda se cubre contrayendo más deuda pública para amortizar la existente.
El problema de la deuda y los acreedores.
El problema subyacente con la deuda reside en quién la posee, los acreedores. Cuando una nación se endeuda, se coloca en manos de sus acreedores. Estos tienen el poder de decidir si refinancian la deuda o no. Si en un momento determinado deciden no refinanciar la deuda, los efectos pueden ser devastadores. Por ello, es importante conocer los peligros de quedar a su merced.
El verdadero problema radica en quién posee la deuda, los acreedores. Resumiendo:
- Al endeudarse, una nación se somete al poder de los acreedores. Estos deciden si refinancian la deuda o no.
- Si deciden no refinanciarla, las consecuencias pueden ser devastadoras para el país.
Ejemplos que ilustran la realidad de la deuda.
Veamos dos ejemplos que nos pueden ilustrar mejor este argumento.
- Comparemos el proceso de endeudamiento público con la compra de una vivienda mediante un préstamo. Compramos una vivienda por 250,000 euros. Sólo pagamos los intereses del préstamo, es decir, contratamos un préstamo americano o PIK. Al cabo de 10 años, debes devolver los 250,000 euros. Si el banco decide no refinanciar tu préstamo, podrías quedarte sin casa. La deuda no es gratuita, ni es que no se pague. Simplemente se aplaza y se refinancia.
Un segundo ejemplo proviene del ámbito público. En 2015, Grecia, atrapada en una crisis de deuda, tuvo que reducir las pensiones públicas en un 40% de la noche a la mañana. Este es un ejemplo concreto de lo que puede suceder cuando el estado no puede refinanciar su deuda o se ve obligado a hacerlo a un tipo de interés mayor.
Resumiendo:
- Comparamos el proceso de endeudamiento público con la adquisición de una vivienda mediante un préstamo.
- Si no se logra la refinanciación, el propietario puede perder su casa.
- La deuda no desaparece, simplemente se aplaza y se refinancia.
- El caso de Grecia: Analizando la crisis de deuda que enfrentó Grecia en 2015.
- Ante la imposibilidad de refinanciar su deuda, el país tuvo que reducir las pensiones públicas en un 40% de manera drástica.
Conclusión
A pesar de la aparente sensación de que la deuda pública no se paga, no deja de ser una falacia. La deuda se paga, se refinancia, y el problema subyacente es quedar en manos de los acreedores. Es importante resaltar la importancia de considerar el impacto a largo plazo de la deuda. Al igual que los riesgos inherentes a su refinanciación.
De todas maneras si quieres profundizar sobre este tema, te dejamos el enlace a uno de nuestros videos, donde mejor se explica este tema. ¡No te lo pierdas y disfruta!
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